Cabify deberá indemnizar a un trabajador despedido tras denunciar incumplimientos laborales
— 15 mayo, 2019Un juzgado de Barcelona dicta que la compañía debe indemnizar al empleado por despido improcedente
La empresa de VTC Vector Ronda, propiedad de Cabify, deberá readmitir e indemnizar con 6.251 euros a un conductor que fue despedido dos días después de que denunciara ante la Inspección de Trabajo «irregularidades en sus condiciones laborales».
Así lo ha determinado el Juzgado Social 2 de Barcelona, que considera el despido del trabajador como un «incumplimiento de la prohibición de represaliar a un trabajador que desea obtener la tutela de sus derechos», según ha informado el Col·lectiu Ronda, que ha representado al conductor en este procedimiento judicial.
A partir de la denuncia, la Inspección de Trabajo evidenció que «la empresa aplicaba a sus trabajadores descuentos salariales que vulneran la prohibición de aplicar sanciones económicas que supongan una minoración de la retribución», y por lo tanto, considera los hechos como «constitutivos de una infracción administrativa grave».
El hecho que impulsó al trabajador a realizar la denuncia fue que, tras retirar la grúa municipal su vehículo por haberlo estacionado de forma irregular, el 23 de febrero de 2018, pidió a Vector Ronda que retuviese la cantidad correspondiente de su mensualidad para hacer frente a la multa, porque él no estaba en disposición económica para realizar dicho pago hasta cobrar su nómina, y que le dejasen un vehículo para poder seguir con su jornada laboral.
Vector Ronda se habría negado tanto a hacer esa retención como a cederle un coche, ni el mismo día ni los dos siguientes y, tras la denuncia a la Inspección de Trabajo, interpuesta el 26 de febrero, el 28 la empresa le comunicó su despido.
Natxo Parra, abogado del Col·lectiu Ronda, ha celebrado el contenido de una sentencia que «explicita el empeoramiento de las condiciones de trabajo que están haciendo empresas como Cabify, con la falsa etiqueta de la economía colaborativa».
«No estamos delante de formas innovadoras de organización empresarial, sino de un claro retroceso en materia de derechos que nos sitúa delante de situaciones que creemos muy superadas, como la imposición de brutales jornadas de más de 60 horas y la amenaza de la aplicación de multas en caso de no lograr desproporcionados rendimientos económicos», ha denunciado Parra.
EFE