Cabify presume de movilidad, pero mantiene casi toda la flota con diésel
— 13 abril, 2018El grupo se niega a dar datos de cuántos vehículos híbridos o eléctricos tiene
Cabify presume de facilitar la movilidad en las grandes ciudades, pero mantiene casi toda su flota con diésel. La empresa se niega a dar datos de cuántos vehículos tiene y cuál es el porcentaje de híbridos o de eléctricos, pero su director general en España, Mariano Silveyra, sí que admitió este jueves en una conversación telefónica con elEconomista que «la mayoría de nuestra flota» sigue usando este carburante, el más contaminante que hay en el mercado.
Y todo ello, frente al taxi, que desde enero de este año solo puede sustituir sus vehículos en la ciudad de Madrid por modelos ECO o de cero emisiones, los únicos que podrán circular a partir de 2020. El problema de fondo radica en que el taxi está sometido a una regulación que no implica a empresas que operan con vehículos VTC, como Cabify. Silveyra explica por ello que el cambio será gradual, aunque sin aportar datos al respecto. «El vehículo eléctrico es más pequeño y la autonomía necesaria por lo que su desarrollo es más complicado, por lo que estamos desarrollando más el híbrido» , asegura el directivo.
El taxi, más ecológico
Pese a ello y aunque su flota es mucho más contaminante, Cabify organizó el jueves un encuentro, al que invitó a la Federación Española del Taxi (Fedetaxi), para abrir supuestamente una vía de diálogo, algo que los representantes de los taxistas rechazaron. Silveyra lo lamentó e insistió en que el objetivo era debatir «el presente y futuro de la movilidad en las ciudades».
Según dijo, «el diálogo es muy importante, ya que el objetivo es buscar soluciones entre todos». Ante su elevado consumo de diésel, la empresa realizó este jueves una campaña publicitaria en prensa asegurando que «somos Cabify y nos encanta ver a la gente subida en un autobús, en un taxi, o en una bici. Porque sabemos que una movilidad más eficiente mejorará nuestra calidad de vida, nuestro entorno y nos permitirá elegir cómo queremos movernos».
Cabify ofrece a sus clientes varias posibilidades en su oferta a través de la app con la que se contratan los vehículos. Entre ellos, figura por ejemplo el Lite, el Executive, el Group o el Kids, dependiendo del tamaño y las necesidades de cada cliente. En la gama, aunque no como primera opción, figura también el modelo eléctrico BMW i3, que se introdujo en 2016 con el objetivo de llegar a cien unidades en un año. Con una flota todavía mínima, el precio de un recorrido con un Cabify Electric es el mismo que con un modelo Lite, que es el que tiene la tarifa más barata.
Aunque no aporta ningún tipo de dato sobre su flota, la plataforma de transporte de viajeros sí que reconoce que su objetivo es poder sumar este año otros 15.000 conductores a su red en España. Cabify ha anunciado también, recientemente, que el año pasado registró un crecimiento del 500 por cien, consolidándose en España como líder absoluto. Pero oculta sus datos de facturación y beneficios.
Una empresa con sede en Delaware
Cabify dice que paga todos sus impuestos en España, pero su matriz está en Delaware, un territorio offshore ubicado en EEUU que ofrece numerosas ventajas fiscales, con lo que pese a su diminuto tamaño ha conseguido atraer a más de dos millones de empresas. La cabecera del negocio es Cabify Mobility International.
El Economista