Ante la situación de intrusismo profesional que sufre el sector regulado del taxi en España, con más de 9.000 vehículos piratas operando impunemente en España, y dada la pasividad y falta de coordinación de las autoridades con competencia en la materia, FEDETAXI propone y solicitará esta semana al Ministerio de Fomento que ponga en marcha un organismo de Coordinación para la Inspección de los transportes de viajeros.

El intrusismo es un grave problema que se ha generado a consecuencia de la crisis económica y que, además, atañe a la economía sumergida. Miles de vehículos y furgonetas sin autorizar se dedican al traslado de pasajeros, muchos de ellos turistas, sin el más mínimo control de las autoridades, los ayuntamientos, las comunidades autónomas y los cuerpos de inspección de Transportes, Trabajo y Hacienda. Estos últimos además se ven dificultados en sus labores por su falta de medios y porque muchas de las actividades a inspeccionar se producen en internet, donde resultan más difíciles de detectarse.

Fomento cumpliría así parcialmente con el compromiso que se alcanzó en 2014 con el Comité Nacional de Transporte por Carretera, al que pertenece FEDETAXI, para reforzar las inspecciones a estos vehículos piratas y a las plataformas digitales de falsa economía colaborativa que, o bien practican elusión fiscal o bien actúan en el “filo de norma” para obtener ventajas competitivas, incluidas actuaciones de dumping social.

La creación de una herramienta web para dotar a los cuerpos de inspección de un seguimiento de vehículos dedicados al transporte, que sí puede servir de control a las plataformas, no resulta suficiente para controlar a vehículos piratas “que por definición se encuentran al margen de la intervención pública e inmersos en la economía sumergida por lo que son necesarias campañas de control ‘in situ’ por parte de las inspecciones de Trabajo y de Transportes”, como destacó Miguel Ángel Leal, presidente de FEDETAXI.

En otra línea de búsqueda de la eficiencia y competitividad, los taxistas solicitarán a Fomento y las CCAA que se promueva decididamente la redacción de un “Libro Blanco del Taxi” para estudiar un verdadero proceso de reestructuración de esta actividad y la inclusión de los taxistas en los planes de movilidad interurbanos. Del mismo modo, se solicitará que se mejore la coordinación de los datos que maneja Fomento con los que dispone Interior a través de la Dirección General de Tráfico (DGT), en este caso, tanto para el transporte urbano como el interurbano.

“La coordinación entre administraciones es vital para el control y mejor ordenación de los transportes en un mercado dotado cada vez más de oferentes y en plena transformación, como es el de la movilidad”, sentenció Leal, quien está trabajando también en una propuesta a los grupos parlamentarios que incluye este y otros temas de trabajo para la presente legislatura.