En la reunión, el consejero de Fomento, Felipe López García, no acordó ningún compromiso con el taxi andaluz, quedando a la espera de las medidas que apruebe el Gobierno central

Representantes de la Federación Andaluza de Autónomos del Taxi (FAAT), entre ellos su presidente, Miguel Ruano Bravo, se reunieron ayer en Sevilla con el consejero de Fomento de la Junta de Andalucía, Felipe López García, con el fin de buscar soluciones reales que ayuden a resolver el conflicto del taxi y los vehículos de alquiler con conductor (VTC).

Un encuentro que llegaba después de haber sido solicitado por la FAAT a la presidenta de la Junta de Andalucía desde principios de año. Las sensaciones previas a la celebración de la reunión ya no eran muy positivas, pues, tan solo unas horas después de convocar el encuentro, el director general de Movilidad llamó al vicepresidente de la FAAT con intención de suspender la reunión, argumentando que creían que no iban a aportar nada nuevo y se encontraban a la espera de lo que decidiesen desde el Gobierno central. «El consejero se reunió igualmente con nosotros pero ya con la idea de que no tenía nada nuevo que contarnos y no estaban al tanto de los pasos que se están dando desde el Ministerio de Fomento», afirma el presidente de la FAAT.

En dicho encuentro, que dio comienzo pasadas las 13:00 horas, y que duró más de dos horas, el consejero informó a los representantes del sector de que «no está muy de acuerdo con la transferencia de competencias a las comunidades autónomas porque cree que solo supone pasar la ‘patata caliente’ de unos a otros», comenta Ruano. Asimismo, el consejero también se refirió a la licencia urbana, «remitiéndose en todo momento a la de Barcelona y afirmando que será tumbada por otros tribunales».

Evasión de responsabilidades

Durante el encuentro, el consejero de Fomento se limitó a trasladar las responsabilidades al Gobierno central. Sin embargo, desde el sector no están de acuerdo y el propio presidente de la FAAT se dirigía al consejero preguntándole si realmente él consideraba que no tenía ningún tipo de responsabilidad en relación al conflicto que vive el taxi andaluz.

«No hace falta que nos recuerde que la situación es complicada porque eso ya lo sabemos. Él comprende el problema que tenemos e incluso reconoce que el origen de todo esto es responsabilidad de su propio partido en el año 2009. Uno escucha a Ada Colau y se nota que comprende el problema y tiene inquietudes por resolverlo. Lo que más nos preocupa es que el consejero no muestra tener voluntad para solucionar el conflicto ni ilusión alguna por conseguirlo. Aquí es todo pasar la patata caliente al Gobierno central, diciendo que es un problema nacional y son ellos los que tienen que solucionarlo», sentencia Ruano.

Miguel Ruano: «Si la actitud del consejero del PSOE de Andalucía va a ser reflejo de lo que haga el ministro de Fomento, en septiembre nos volveremos a ver en las calles”

El presidente de la FAAT entiende que no tenga «competencias suficientes en cuestiones de carácter nacional, pero sí a nivel regional». En este sentido, la federación presentó el pasado año una batería de 18 propuestas, elaboradas por Fedetaxi, y también los compañeros de Málaga llevaron sus propias propuestas. Todo ello para intentar mejorar la situación que vive el sector en Andalucía.

«Él tiene competencias para otorgar licencias y para controlar el intrusismo. Nosotros nos reunimos con él dos veces el año pasado por unas movilizaciones que hubo en la Feria de Málaga y presentamos una serie de medidas procompetitivas, tales como la precontratación del servicio mediante app para fijar un precio con el cliente, que puede abrirnos muchas puertas, o también el taxi compartido, que lo reclaman los usuarios. ¿Habéis hecho algo al respecto? No, no habéis hecho nada», cuenta el dirigente de la FAAT.

El único avance alcanzado, “y todavía está en el aire”, es la creación de una comisión entre la Junta de Andalucía y Federación Andaluza de Municipios y Provincias para estudiar la viabilidad de la modificación de la normativa, que han planteado varias veces en el Ministerio de Fomento. “Fomento traslada la responsabilidad a la comunidad, la comunidad vuelve a trasladarla al Gobierno central y así no se consigue nada”, comenta.

Miguel Ruano manifiesta sentirse descontento con la reunión, con sensaciones «muy negativas» ante la falta de voluntad del consejero. “No tiene interés ni ilusión alguna en resolver esta problemática. Si la actitud del consejero del PSOE de Andalucía va a ser reflejo de lo que haga el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, en septiembre nos volveremos a ver en las calles», sentencia.

El próximo día 4 de septiembre hay una reunión convocada, a la que van a asistir todas las asociaciones del sector con representación nacional, para hacer las cosas de forma más coordinada. En dicho encuentro se va a trazar una hoja de ruta para estar preparados para lo que pueda ocurrir el próximo 14 de septiembre, día en el que el Gobierno informará de las medidas que quiere materializar para poner fin al conflicto que vive el sector. “Sabemos lo que queremos y sabemos lo que estamos dispuestos a hacer si no se cumple. No nos conformaremos con cualquier migaja”, finaliza Ruano.