El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se reunió ayer con representantes de la Confederación de Taxistas de la Costa del Sol, con quienes acordó una mesa de trabajo que se celebrará a principios del mes de septiembre y a la que serán invitadas las asociaciones que agrupan a los propietarios de licencias de vehículos con conductor (VTC).

De la Torre estuvo acompañado por el primer teniente de alcalde y portavoz del equipo de gobierno, Carlos Conde, y por la concejala de Movilidad, Elvira Maeso, además de por técnicos municipales tanto de la Policía Local como de Movilidad.

En la reunión, el regidor reiteró los compromisos que le trasladó por carta el 13 de agosto al presidente de Asociación Unificada Malagueña de Autónomos del Taxi (Aumat), José Royón, como son estudiar una tasa específica para las licencias y autorizaciones de vehículos de alquiler con conductor, aumentar la vigilancia por parte de la Policía Local en coordinación con las asociaciones de taxistas, ampliar la formación en materia de transportes a la totalidad de los agentes y reiterar la petición a la Administración competente -la Junta de Andalucía- para que controle el límite de servicios que pueden prestar las VTC expedidas fuera de Andalucía.

En relación con la formación, De la Torre ofreció la Escuela de Seguridad Pública del Ayuntamiento de Málaga (Espam) para acoger cursos en los que participen, si los ayuntamientos vecinos lo necesitan, policías locales del resto de la provincia.

Además, De la Torre volvió a recordar que aunque el Ayuntamiento carece de competencias en materia de VTC, no tendrá inconveniente en actuar como interlocutor entre el sector del taxi de Málaga y las administraciones central y autonómica para abordar la búsqueda de una solución al problema que está en el origen del paro que dejó a la ciudad de Málaga sin taxis en plena Feria.

El alcalde ha manifestado desde el comienzo de la huelga que el sector del taxi debe adaptarse a los nuevos tiempos y ofrecer servicios más cómodos, al igual que hace Cabify, y que «tiene que plantearse una modernización y son conscientes y están trabajando en ello, para crear el smart taxi».

Además, también ha declarado que ni los taxistas ni los que tienen licencias VTC tienen que verse «como enemigos» sino que ambos tienen que «aliarse y trabajar juntos; y la administración marcar la pauta» contra los «intrusos», que no tienen licencia de taxi ni de VTC.

Huelgas y quejas contra el «intrusismo»

Los taxistas de Málaga iniciaron el 13 de agosto una huelga indefinida como consecuencia de lo que califican como «intrusismo» del servicio de los vehículos turismo con conductor (VTC) que representa en la capital la empresa de transporte Cabify. Dos reuniones en menos de doce horas con el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, no consiguieron enfriar la determinación del sector de iniciar un paro en plena Feria. El sector se queja de «prácticas ilegales» de Cabify, al considerar que sus vehículos no permanecen en su base, sino que esperan en lugares estratégicos en los que la afluencia de clientes es mayor para ofrecer el servicio de manera más rápida. Otra demanda del gremio del taxi es la proporción entre vehículos de uno y otro tipo. «Según la normativa, debe haber un VTC por cada 30 taxis , y aquí en Málaga eso no se está cumpliendo». Además, a los taxistas no sentó nada bien que se ofreciera a VTC de otras provincias venir a prestar servicio en Málaga en agosto y en especial durante la Feria.