Los taxis ‘alternativos’ se hacen con el 10% del negocio en Granada
— 8 junio, 2017El avance de plataformas como Uber y Cabify llega a Granada con 50 vehículos registrados que operan con licencias VTC. En la capital hay una ratio cercana al 1:10, cuando con la anterior Ley de Ordenación del Transporte Terrestre debería estar situada en 1 de cada 30, lo que significa que los coches de alquiler con chófer triplican el número máximo estipulado antes de la última reforma legislativa. En la capital operan 560 taxis y cerca de 80 en la provincia, un sector que está a la expectativa de comprobar cómo se desarrollan las fiestas del Corpus, ya que a los 50 vehículos VTC se puede sumar estos días cualquier conductor de España que opere bajo esta licencia, ya que según explican desde la Gremial del Taxi pueden hacer hasta un 20% de sus servicios fuera de la localidad en la que están registrados y en una comunidad autónoma distinta.
El precio del servicio es el caballo de batalla, ya que los taxistas defienden que sus tarifas son fijas y están consensuadas entre la Gremial, el Ayuntamiento y Facua, unos precios que llevan siete años congelados y que se revisan cada año siguiendo del IPC de septiembre. Por contra, los vehículos que operan con licencias VTC «manejan algoritmos para variar el precio según la demanda, con los que los trayectos se incrementan en caso de días de lluvia o si hay festividades que hacen que aumenten los clientes», según señala el taxista Sebastián Santiago, uno de los impulsores del aumento de los Eurotaxis en Granada junto a Antonio Tejada, presidente de La Ciudad Accesible, ya que ambos planificaron las mejores opciones para solucionar el problema de los taxis adaptados para aumentar la capacidad de pasajeros con el fin de que las personas con movilidad reducida puedan contar con este servicio público básico.
En este contexto, la Gremial del Taxi pondrá en marcha próximamente una nueva iniciativa de comunicación con mostradores portátiles en las principales paradas de la ciudad que informarán a los ciudadanos de lo que cuesta cada viaje. «Los VTC no tienen taxímetro y el precio es un acuerdo entre el cliente y el propietario del coche, con lo que al final es el usuario el que acaba pagando por la desinformación y por la forma de actuar de plataformas como Uber y Cabify», insiste Sebastián Santiago.
Además, el sector del taxi presenta otras reclamaciones adicionales: la eliminación de las ventajas fiscales para los VTC, con el IVA reducido del 10%, una identificación homogénea de los VTC y que se prohiba la especulación con la compraventa de estos permisos. Según los datos del Ministerio de Fomento, en España hay 64.447 licencias de taxis y 5.622 licencias VTC, lo que deja un ratio de 11,46 taxis por cada VTC, una media parecida a la que se da en Granada, aunque no se llega a los niveles de Málaga. En este sentido, el presidente de la Gremial del Taxi de Granada, Ramón Alcaraz, destaca la competencia desleal que sufren los taxistas ante esta situación. «Se ha creado un vacío legal que provoca que se concedan más licencias», detalla el presidente convencido de que son los políticos quienes deben tomar carta en el asunto. Según explica las licencias VTC que no se conceden son reclamadas después en los Tribunales que, finalmente, acaban por concederlas. «Es necesario regular el sector y acabar con estas situaciones que además causan un gran malestar entre los propios trabajadores» añadió.
En este sentido, Alcaraz también denuncia el intrusismo de taxistas de otros municipios de Granada en la capital. La competencia no solo llega de parte de las VTC… «Hay taxistas que vienen de otros pueblos y que sólo tienen permiso para recoger allí y sin embargo cuando traen a un cliente a la capital aprovechan y dejan la luz verde encendida para seguir prestando servicio», criticó.
Cabe resaltar que la Gremial está abierta a firmar convenios con algunos municipios del Cinturón para formar un área de prestación «más amplia». Pero hasta que esto no esté aprobado oficialmente, Alcaraz reivindica que cada taxista opere en su zona. «No podemos trabajar así, el otro día recibimos a dos taxistas -uno de Armilla y otro de Granada- en la sede que, tras discutir, casi llegaron a las manos», explica el presidente de la Gremial que detalla como en el club Geisha también ha habido conflictos entre los taxistas que acuden a recoger a los clientes. «Recientemente se produjo un altercado grande porque había taxistas de otros municipios y hubo que llamar a la Policía de Atarfe», detalló Alcaraz quien remarcó la necesidad de que los ayuntamientos «muevan pieza».
Por otra parte, el presidente explicó que varios taxistas del área Metropolitana se han constituido de forma paralela y «a su aire». «Han pintado los coches sin tener en cuenta los ayuntamientos a los que pertenecen», detalló Alcaraz que incluso a llegado a denunciar a algunos que ofrecían sus servicios en páginas web por lo que han sido denunciados.
Precisamente, estos taxistas fueron los únicos que se manifestaron el pasado martes 30 de marzo en las calles de la capital. Sobre las una de la tarde hicieron un recorrido por el centro a golpe de claxon para unirse de forma simbólica a los trabajadores que se manifestaron en Madrid y Barcelona. Por otra parte, hasta la capital de España se desplazaron más de un centenar de taxistas de Granada para reclamar «que se respete la ley, en cuanto al porcentaje de licencias VTC».
Granada Hoy