Los taxis de Ourense se adaptan a las necesidades de los clientes y a la norma

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En la capital ourensana hay 106 licencias de taxi. El colectivo ha tenido que adaptarse a los nuevos tiempos, tanto por la demanda de los clientes como por una normativa cada vez más concreta. Por eso a los vehículos tradicionales se unen otro tipo de turismos que ofrecen un plus que no repercute en el precio del servicio.

Un 10 % de los taxistas ourensanos han apostado por el coche híbrido. La ventaja para ellos tiene que ver con el consumo -menor que el gasoil- y para el ciudadano, con el cuidado medioambiental. Es automático y tiene dos motores: el de gasolina y el eléctrico, que funciona con dos baterías. Por la ciudad, por donde se circula a poca velocidad, se utiliza esta última opción, con el ahorro que eso supone. En grandes ciudades de Europa ya es obligatorio que los taxistas utilicen este tipo de vehículos: «Yo veo que el futuro tiende a ser eléctrico o híbrido», subraya Cal. «La gente al principio, cuando sube al taxi, se sorprende porque nota que es diferente porque no hace ruido y te hacen muchas preguntas. Pero poco a poco se van acostumbrado».

La asociación de taxistas de Ourense cuenta en la actualidad con tres vehículos adaptados para transportar una silla de ruedas. En pocos meses se añadirá uno nuevo y antes del 2018, la ciudad contará con el quinto. Esta es la cantidad que debe tener en relación al número de habitantes.

Un taxista de Ourense ha adaptado su vehículo para poder transportar bicicletas. Es un servicio adicional pero no obligatorio. Supone una buena alternativa para aquellos peregrinos que hacen la ruta de la Vía da Plata en dos ruedas y necesitan ayuda. «Tengo hecho muchos servicios de peregrinos. Hoy mismo fui a llevar a una persona a Lalín con su bicicleta. Una avería la puede tener cualquiera». Explica que es Teletaxi el que se pone en contacto directo con él cuando surge una demanda de este tipo. «Yo lo hago legal. Si no la bicicleta se puede desmontar y meter dentro de un coche, pero puede pararte tráfico y multarte», afirma. Además, subraya, no tiene ningún plus en el coste, solo se paga el trayecto.

Actualmente, no todos los taxista de Ourense cuentan con un terminal de punto de venta (TPV) en sus vehículos. Así que pagar con tarjeta un servicio no es una opción generalizada. Únicamente cuentan con este servicio unos cincuenta vehículos, la mitad de la flota.

Fuente: La Voz de Galicia

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