El sector del alquiler de coches con chófer amparado en el paraguas legal de las licencias VTC (Vehículo de Turismo con Conductor) «está regido por unas normas concretas, por lo que haremos lo que haga falta para que se respeten y, si es necesario, acudiremos a los tribunales para que se cumpla la ley». Así resumía ayer Ismael Arráez, presidente de la Gremial del Taxi de Valencia, los planes que el sector tiene para tratar de frenar las presuntas «ilegalidades» que se cometen en el ámbito de los VTC. En esta línea, resumió, por un lado, que la normativa actual únicamente permite una licencia de este tipo por cada 30 taxis, por lo que, como máximo, la Comunitat podría acoger en la actualidad 147 VTC, ya que hay algo más de 4.400 taxis.

Sin embargo, según los datos que maneja la Conselleria de Obras Públicas, en breve la Generalitat habrá otorgado ya 450 licencias de VTC. De ellas, 216 están ya en manos de sus propietarios, mientras que otras 34 están a la espera de contar con la documentación requerida. Las 200 restantes están pendientes de la ejecución de una sentencia favorable a la empresa Ares Capital. Pero además, añadieron desde el Consell, «el número total de VTC a corto plazo oscilaría entre un mínimo de 450 en caso de no prosperar ninguna de las sentencias pendientes o de un máximo de 1.979 si finalmente estos procesos culminan a favor de esas VTC». Estas licencias pendientes de sentencia, aclararon, fueron denegadas por la Generalitat por la interpretación que el Gobierno autonómico hace de la legislación en la materia, que es estatal.

Por tanto, este exceso en el número de licencias que, según los taxistas, contraviene la legislación será uno de los asuntos que el sector tratará de recurrir en los tribunales. Para ello, se está ultimando la puesta en marcha de una plataforma, integrada por todas las asociaciones valencianas de este colectivo que, como principal función, tendrá la de «defender a los taxis del intrusismo», apuntó Fernando del Molino, presidente de la Federación Sindical del Taxi de Valencia y Provincia.

Otro de los aspectos que indigna a los taxistas, ya que les supone una competencia desleal, es que parte de estos vehículos con conductor, «captan a viajeros en la vía pública», algo que no permite la normativa que los regula. «Deben contar con un contrato previo del recorrido, algo que se saltan», aseguró Del Molino; una «hoja de ruta», aclaró Arráez, quien lamentó que, en ocasiones, surgen incluso enfrentamientos con los taxistas a la hora de recoger a los clientes. «Hacemos también un llamamiento a la policía, aunque nos consta que ya han caído muchos que no cumplen la legalidad», aseguró este portavoz.

Por su parte, el secretario general de USO-Taxi, Fernando Ballester, destacó que la futura plataforma estudiará la posibilidad de recurrir aquellas licencias de VTC que están en fase de adjudicación, ya que «no existe ningún estudio económico que justifique esta necesidad». Además, advirtió que la obtención de estas licencias supone para los beneficiarios «un auténtico pelotazo», ya que hacen negocio: «no les cuesta nada y las venden por mucho dinero», resumió, «prometiendo ingresos seguros». Sin embargo, «el comprador luego tiene que rodar en busca de clientes», incumpliendo la normativa.

Fuente: Las Provincias