Taxis y autobuses reclaman ser eximidos del alza del diésel

Solo un tercio del parque de taxis funciona con gasolina o energías limpias

La subida de la fiscalidad del diésel que planea el Ejecutivo va a tener un impacto directo en el bolsillo de algunos colectivos como los conductores de autobuses o los taxistas. De ese incremento, que se ha retomado del presupuesto alternativo que el PSOE presentó el pasado mes de abril, tan solo se van a librar los transportistas y los agricultores, que son los que tienen acceso al gasóleo profesional.

Desde la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) reclaman que si finalmente se produce ese incremento de la fiscalidad que se les compense a través de gasóleo profesional. “Esta recomendación del Ejecutivo pretende impulsar una movilidad más sostenible y eficiente, pero lo que haría es penalizar al autobús, que ya hace una importante aportación al desarrollo de una movilidad sostenible y una sustancial contribución a las arcas públicas, que se eleva a más de 1.000 millones de euros”, subraya Rafael Barbadillo, presidente de Confebus. De hecho recalca que al ser un transporte colectivo, el autobús contribuye a la disminución de la congestión y a la contaminación causada por el tráfico en las ciudades y las carreteras. “Cada autobús puede sustituir entre 14 y 30 vehículos”, remarca.

Desde la Asociación Gremial de Auto Taxi de Madrid recuerdan que los taxistas también se ven afectados y reclaman, al igual que el transporte, que se les exima mediante una compensación con gasóleo profesional. Pese al esfuerzo por la renovación de las flotas, una gran parte del parque automovilístico de los taxis que circulan por Madrid sigue funcionando con gasóleo; en concreto, 10.175 vehículos funcionan con este carburante de los 15.723 que están censados, lo que supone un porcentaje del 65%. Una cuota que es extrapolable al resto de grandes ciudades con una flota elevada de taxis.

Otro colectivo que también ha pedido se le eximan de la futura subida es el de autónomos. Los cálculos de la Federación Nacional de Autónomos (ATA), cuyo presidente es Lorenzo Amor, elevan la cifra de afectados a 200.000 profesionales, entre los que incluyen 40.000 taxistas, 20.000 repartidores, 25.000 agentes comerciales y miles de conductores de ambulancias o autobuses. Desde UPTA calculan que el sobrecoste anual para este colectivo por el alza del diésel rondará los 2.100 millones de euros.

LAS CLAVES DE LA FUTURA SUBIDA

Presupuestos alternativos. La medida ha sido calcada de as cuentas que presentó el PSOE en abril. En ellas preveía que una equiparación fiscal de gasolina y gasóleo aportaría 2.140 millones a las arcas públicas y dividiendo el impacto en una legislatura se cifra en 600 millones de euros al año.

Afectados. El presupuesto alternativo solo eximía al gasóleo bonificados para transportistas y agricultores y no hacía mención a taxistas o autobuses.

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